lunes, 18 de octubre de 2010

Manuel Alexandre; la foto que perdí

Cuenta Alberto García Alix, en uno de sus escritos publicado bajo el título de “Moriremos mirando” por la editorial La Fábrica, como perdió una gran imagen por una especie de mezcla entre el acto de admiración y la cobardía en el acto fotográfico; ese que puede regalarte la mejor de las imágenes o hundirte en la miseria al recordar toda la vida que nunca apretaste el botón que te otorgaba la detención de la magia que tenías delante, jamás pensé que pudiera llegar a ocurrirme lo mismo.

El miraba a su abuela “una delgada y fotogénica mujer” en un momento en el que se daba una feliz concordancia entre el buen decorado, la buena luz y el gran momento, pero no estuvo ágil y “teniendo la certeza de que en segundos, esa imagen única y extraordinaria desaparecería para siempre” no fue capaz de coger la cámara que permanecía junto a él y perdió, efectivamente, esa imagen para toda la vida.

Siempre me atrajo ese instante, pero jamás pensé que a mí también me llegaría “la hora” de ese mismo momento. Diciembre del 2009. Noche. Café Gijón. Paseo de Recoletos, Madrid. Mi querida Blondi y yo, después de tomarnos una invernal y navideña copa de anís con hielo -ni siquiera rebajada por un diminuto golpe de agua-. Lo que los débiles llaman palometa- mi cámara en mano y ella con su boina blanca que yo luego ordené en blanco y negro, nos disponíamos a salir del centenario café cuando abriendo la puerta dejamos pasar, saludando con exquisita reverencia y admiración, a Don Alvaro de Luna y a Don Manuel Alexandre ,que acababan de finalizar su tertulia diaria.

Don Manuel nos miró con una ligera sonrisa afectuosa y enfilaron la acera dos hombres de gran porte; Alvaro de Luna a la izquierda y a su derecha, agarrado de su brazo Don Manuel caminando despacio con el Paseo de Recoletos como escenario, las luces de los coches enredados en el estrés y las luces de la navidad observando e iluminando la escena. Allí estaban, dos genios de la escena, y mi querida Blondi y yo, agarrados también, disfrutando de aquel instante sabiendo que era parte de la historia de nuestro país. Me quedé paralizado…me vino a la mente “Plácido”, “Atraco a las tres”, “Cómicos”, “Amanece que no es poco”, “El Verdugo”, “Elsa y Fred” y tantas escenas de otras grandes películas. Un hombre integro y bueno y la sensación de haber perdido, como le había ocurrido a Garcia Alix, una de las fotos de mi vida.

sábado, 9 de octubre de 2010

Jugar con fuego

No lo oculto. Soy contrario a la celebración de Primarias si estas se hacen, tan solo, en un partido político. Si, hablo del Partido Socialista Obrero Español, una organización centenaria que es, ha sido y será un ejemplo claro de sentido democrático y que ha hecho por este país, sin ningún lugar a dudas, más que otros gobiernos desde que nuestra democracia quedó instaurada mal que le pese a algunos.

Soy contrario a la celebración de primarias porque no son un ejemplo de democracia interna. En todo caso un proceso más pero no el único ni el más democrático ¿o es que antes de que Almunia tuviese la “genial” idea de poner urnas frente a los militantes los órganos competentes para la toma de decisiones no tenían legitimidad democrática representativa?. Por cierto, Zapatero no salió de unas Primarias…

He tenido la suerte de vivir desde dentro los tres procesos de primarias celebrados en Madrid….”rompeolas de todas las Españas”. Borrell contra Almunia…¿recuerdan el final?.....Morán contra Leguina….¿recuerdan?...en este caso Leguina sigue sin levantar cabeza y sus exabruptos ya claman al cielo….y ahora Tomás Gómez frente a Trinidad Jiménez. He ganado y he perdido…conozco los dos sabores…Pertenecí al equipo de Borrell, pertenecí al equipo de Fernando Morán y he votado a Trini además de ser Interventor de su candidatura. En todas las ocasiones, desde mi punto de vista, ese proceso solo ha servido para abrir heridas que luego son difíciles de cerrar.

Hoy más que nunca, creo en la legitimidad de la representatividad como se ha hecho siempre, salvo que, un día, por Ley o como sea, todos los partidos democráticos tuviesen la obligación de llevar a primarias la selección de candidatos/as….¿dónde situar el límite? ¿Por qué no Concejales y Concejalas?...¿Ministros Ministras?.... lanzo la reflexión.

Yo, como socialista convencido y militante estoy cansado de que el Partido sea el pim pam pum del momento por culpa de ensayos de laboratorio. Es ahora el momento de la fuerza, de la unidad y del sentido común para hacer frente a un momento como el que estamos atravesando. Esto no es una crisis….es más que eso…un cambio de era cuyo camino no está en jugar con fuego y si en nuevas ideas y proyectos que devuelvan la ilusión y el futuro que tanta gente tiene truncado. En eso estamos desde el Partido Socialista Obrero Español…los demás están en lo de siempre….la confrontación y el sálvese quien pueda…y en creerse el Partido de los Trabajadores…miren a los ojos a Cospedal, a Aguirre, a Aznar, a Gallardón o a Soraya y verán claramente como las niñas de sus ojos están llenas de cayos de tanto trabajar.