miércoles, 6 de febrero de 2008

Prefiero Gomaespuma

Al final van a tener razón estos señores de la derecha y vamos a ver como la gente normal, el ciudadano de a pie, los que caminamos por la vida con la decencia por delante, esos que Rajoy cree que son sus votantes -¡¡Ay cuando la realidad le reparta el 9 de marzo las collejas electorales que merece!!- carecemos de algo tan importante para seguir adelante como es el humor.

Nunca aprenderemos a soltar la carcajada, el dolor de tripas, el ahogo y las lágrimas del buen hacer de estos nuevos miembros del club de la comedia, estos nuevos titiriteros y cómicos de la legua en que se están convirtiendo los pepepopulares- ¿¡¡Cómo están ustedeeeeees!!?.

Somos, la gente normal, individuos sosos y pesados, aburridos y grises por no saber apreciar las divertidas gracietas de los obispos, el ingenio de los que aseguran que Andalucía vive de la sopa boba o el “pártete el pecho” del no va más cuando utilizan con hábil desmesura el terrorismo para intentar añadir a su cuenta un par de votos más a costa de poner los pelos de punta al más sosegado de los ciudadanos.

Lo dicho, que no tenemos cogido el punto del humor y por eso no hemos sabido apreciar en todo su artístico esplendor la genialidad de Dimas Cuevas, uno de los candidatos del Partido Popular al Senado por Albacete, cuando dice, entre otras lindezas, que "Las bodas de lesbianas tendrán que incluir diversas variedades de tortillas; y los convites para homosexuales serán a base de perritos calientes y plátanos al horno". Me recuerda el humor tan divertido que utilizaban en el diario Arriba cuando hablando de la Barraca de Federico García Lorca, se referían a él como “Federico García Loca”, y a renglón seguido aseguraban que era culpa de una errata…¡¡Que descojone!!.

Así que aplíquense el cuento y aprovechen el momento para darle a la mandíbula que Rajoy y sus chicos –modelo Dimas- nos prometen un nuevo mundo de alegría, luz y color.

Lástima de años 80 que se llevaron a Fofó y nos dejaron a este payaso. (Hago justicia y diré que esta frase no es mía pero estaba deseando utilizarla)

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ya quisieran los personajes del PP y sus amigos católicos, apostólicos y romanos, parecerse en algo a los actores y guionistas del club de la comedia. Ellos sí que saben de la vida cotidiana de la gente y no esos otros arrogantes que practican el insulto diario como credo. Lo que parece que no han aprendido muy bien es a pedir perdón tal y como propugna la Santa Iglesia católica. ¿cuándo veremos al buen católico Lamela pedir perdón a los médicos del Severo Ochoa de Leganés a los que con falsedad y alevosía ha perseguido y desprestigiado como profesionales cuyo único delito fue aliviar el sufrimiento de la gente? Qué lastima, parece que de cobardes y católicos está España llena, ¡pero menos mal que nos queda el Club de la Comedia!