martes, 17 de junio de 2008

Todos somos dependientes

Escuela de Verano de la Diputación de Granada en Almuñecar. “Sociedad del Conocimiento, nuevas tecnologías y atención a la dependencia”. Perfecta organización, un excelente ambiente y un foro para la reflexión sobre el nuevo derecho universal que pone en funcionamiento la Ley 39/2006 de 14 de diciembre.

Todo el mundo de acuerdo. Este es uno de los textos más importantes que se han puesto en marcha en las últimas décadas, quizás desde aquellos 80 en los que los Gobiernos de Felipe González pusieron en marcha la extensión de las Políticas Sociales con Matilde Fernández en aquél imparable Ministerio (un lujo contar con ella para la clausura del viernes). Todo el mundo de acuerdo también en el hecho de que esta Ley, cuya andadura acaba de comenzar, tiene todavía que caminar unos metros más para comenzar a poner en funcionamiento los primeros arreglos. Ha creado grandes expectativas, se esperan muchos avances pero es cierto que aún tiene algunas limitaciones propias de cualquier comienzo.

Dicen los entendidos en materia del desarrollo vital, que a eso de los 40 se pasa una curiosa crisis de identidad de la que se sale volviendo a los vaqueros, poniéndose de nuevo los panamá jack y comprándose la ansiada vespa que nunca pudimos montar cuando éramos más jovencitos o se vuelve uno cada día un punto más conservador pasando, en algunos casos, a meter en la urna una gaviota vestida hoy de engañosa modernidad enmarcada en una tecla de azul futurista. Es cierto, como habrán podido adivinar acabo de salir de ella y, salvo los panamá jack, volvieron los vaqueros y monto una flamante vespa LX 125 por los preciosos caminos de Granada pero en vez de gaviotitas –por cierto ave carroñera- cada día estoy más rojo y en “tonito pelín radical” que me dicen los conocidos. Y es desde esa nueva “radicalidad” , que no es más que el inicio del nuevo pensamiento utópico, el que me lleva a la reflexión de nuevos tiempos que habrán de hacer avanzar un texto tan importante como es la Ley de la Dependencia.

La Revolución Industrial trajo de la manita un nuevo modelo social, político y económico en el que nos hemos movido como peces en el agua hasta ahora. La Revolución tecnológica, por imperativo, traerá –ya asoma las primeras patitas- un nuevo modelo porque el paradigma está ya más que “cascao”, y es en este momento cuando más hemos de demandar y pensar reformas de calado. Algunas propuestas: gravar a las grandes fortunas, nuevos impuestos tipo ATTAC que graven las grandes transacciones por una justicia económica global con el objetivo de aumentar la necesaria financiación, más políticas de formación y cuidados para los cuidadores y cuidadoras que hacen una gran labor, más y mejores políticas de información para los “usuarios” y sobre todo, ahora que Obama despierta una nueva “kennedymania”, la certeza de que no podemos tratar de mejorar un texto desde la perspectiva del constante demandar y no ofrecer. Comencemos a preguntarnos “que es lo que nosotros podemos hacer por el Sistema y no que puede hacer el Sistema por nosotros”. La realidad es que, no alguna vez, sino en cualquier momento cualquiera de nosotros podemos ser dependientes.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Di que no, que tu no te estás radicalizando, son ellos que cada día les gusta ,más dormirse en los laureles.
Y las gaviotas, que imiten a “las de verdad” y se marchen a vivir a los vertederos de basuras, que es ahí donde mejor encajan.

Y abrazo, ya desde Madrid, y que terminéis bien la escuela.

Rubén

Anónimo dijo...

Gracias Rubén. Un abrazo. La escuela ha sido un ejemplo de amistad, formación, tolerancia y excelente ambiente. Ahora en Granada disfrutando del Festival y de las primeras fotos.

Unknown dijo...

No había tenido ni un momento para buscar tu blog... perdóname. Hoy, domingo, la mente me va abriendo espacios en blanco reservados durante toda la intensa semana que hemos vivido en Almuñécar. Uno de ellos era tu blog, y ha sido en esta tarde de domingo cuando mi mente se ha relajado y me ha recordado esa tarea pendiente. Qué sabia es!

Gracias por tu reflexión sobre la Escuela, espero que hayas disfrutado tanto como yo.

Gracias por participar en Enredados y por dejarme conocer a Matilde.

Sois encantadores.

Un abrazo,

Anónimo dijo...

Un abrazo a los dos. Siempre gracias por el ambiente tan bueno que sabéis crear. En estos tiempos que corren yo prefiero caminar por la vida de servicio de la información y no por las autopistas que no dejan ver el paisaje ni la gente que te acompaña. Saludos